Comprar un terreno y poder construir la casa de sus sueños, es algo que queremos algunos. Es difícil, pero no imposible.

A pesar de la subida de precios respecto a los materiales de construcción y la mano de obra, debido a la inflación. Aun así, el presupuesto necesario para construirse una casa se ha mantenido bastante estable, dado que de esta manera se evita el margen de las promotoras, lo que puede traducirse en un ahorro aproximado del 15% al 20% sobre el precio final de la vivienda.

Otro aspecto fundamental a la hora de construirse su propia casa es saber calcular, de antemano, el coste de todo lo que desee y ajustarlo al presupuesto del que dispone. Esto sería aproximadamente un 80% de su presupuesto.

El otro 20% restante va destinado a los imprevistos u otros gastos tales como impuestos, gestiones tras la obra, licencias, etc.

Cuando decide construirse una casa lo ideal es disponer ya de un terreno o, si no, comprar uno. Desde la última crisis, los precios de estas se han mantenido bastante estables, aunque elevados en determinadas ubicaciones. Lógicamente, cuanto mejor ubicación mayor será el precio del terreno.

¿Cómo puedo saber que un terreno es idóneo para construir?

Para saber si en el terreno que ha comprado se puede realizar obras van a tener que hacer un estudio topográfico que ronda unos 250 a 400 euros y un estudio geotécnico que puede salir a unos 650 a 800 euros, cara a la cimentación de la vivienda.

Una vez realizados estos estudios es necesario contratar un arquitecto ya que será el encargado de comprobar si la parcela reúne los requisitos para construir en ella. Este posteriormente podrá ser su encargado de redactar el proyecto básico de edificación con el que van a poder solicitar la licencia de obras. Mientras esperan la aprobación lo ideal en ir pidiendo presupuesto a varias empresas para así haceros una idea del conste que conllevaría dicho proyecto.

¿Qué impuestos deberá afrontar el auto promotor?

Algo de lo que uno nunca se libra es de los impuestos que en este caso suelen estar en un 20% que se adjunta al precio final del inmueble. Y, aunque este estudio hace referencia a la promoción de viviendas por parte de promotoras, lo cierto es que quien decide construirse su propia casa no está exento de la carga tributaria.

Por otro lado, están los gastos derivados de la escritura de compraventa del solar (honorarios del notario y del registrador, impuestos de transmisiones patrimoniales, el impuesto de actos jurídicos, etc).

Otra cosa importante de la que no hay que olvidarse es de la contratación de suministros tales como agua, electricidad, gas y telecomunicaciones. El precio de estas depende del tipo de compañía a la que recurran.

Pros y contras de construirse su propia vivienda

El que se lanza a construirse su propia casa debe ser consciente de todos los riesgos que conlleva ya que al cliente en vez de ampararle la ley, como a las promotoras en caso de imprevistos o retrasos es uno mismo el que asume todo el riesgo de los imprevistos que puedan surgir.

En caso de no querer asumir dichos riesgos, siempre se puede recurrir a comprar obra nueva que tenga la posibilidad de personalizar cientos aspectos de la misma o comprar una casa para restaurar.

Aún así si esta dispuesto a sumir los riesgos, contando con buen arquitecto, puede llagar a vivir en una obra de arte.