Al considerar la compra de una vivienda, surge comúnmente la pregunta de si es mejor comprar obra nueva o de segunda mano. Esta decisión es crucial y en este artículo, te proporcionaremos una visión detallada de las ventajas y desventajas de optar por una vivienda nueva o una de segunda mano.
La elección entre una vivienda nueva y de segunda mano no tiene una respuesta única. Ambas opciones tienen sus propios beneficios y desafíos. Las viviendas de nueva construcción tienden a ser más eficientes energéticamente, aunque suelen tener un precio ligeramente mayor. En cambio, las viviendas de segunda mano a menudo están en ubicaciones céntricas, pero pueden requerir mejoras. Tu elección final dependerá de tus preferencias y necesidades como comprador.
Ventajas de las Viviendas de Obra Nueva
Algunas de las ventajas de las viviendas de comprar obra nueva incluyen una eficiente distribución, buena iluminación, grandes ventanales, amplias terrazas y balcones, y una mayor integración de domótica en comparación con las viviendas de segunda mano Así como habitualmente disponen de zonas comunes como piscinas, jardines, parques infantiles y áreas abiertas. Otra de las ventajas de adquirir viviendas nuevas sobre plano permite personalizar acabados y distribución, ofreciendo flexibilidad en la adaptación del inmueble a las preferencias del comprador. Por el contrario, la desventaja es que habrá que esperar hasta que esté construida para entrar a vivir. Otras cosas a tener en cuenta son:
- Eficiencia Energética: Las viviendas recién construidas tienden a ser más costosas, pero son altamente eficientes en términos de energía. Esto resulta en un menor consumo de energía y, por ende, en un ahorro en tus facturas de servicios públicos. El código técnico de la edificación (CTE), que unifica las normativas de construcción y eficiencia, establece que todos los nuevos edificios deben garantizar un “uso racional de la energía”. Este documento obliga a que las viviendas cuenten con aislamiento térmico para controlar su temperatura, iluminación de bajo consumo y que parte de su gasto energético proceda de fuentes renovables (producidas en el mismo edificio o el exterior). Este nivel de eficiencia queda registrado en la etiqueta de calificación energética, un elemento obligatorio para cualquier vivienda que se venda o alquile.
- Menor gasto: Al tratarse de una vivienda de obra nueva el comprador no deberá hacer grandes reformas, ni en el interior de la propiedad ni en el edificio, por lo que la posibilidad de que haya que aprobar derramas comunitarias es mucho menor que en una de segunda mano. “Durante los primeros 10 años, la mayor parte de los gastos comunes serán ordinarios: ascensor, electricidad y agua comunitarios, limpieza y administrador”.
- Garantías de Calidad: Las viviendas de obra nueva cuentan con garantías de calidad respaldadas por la Ley de Ordenación de la Edificación (LOE), esto asegura que todo inmueble nuevo tiene una cobertura de un año para los daños o defectos en los acabados de la obra, tres para los defectos que atañen a la habitabilidad de los residentes y 10 para fallos en la estructura del edificio.
- Impuesto: Los impuestos son otro factor a tener en cuenta cuando se trata de una vivienda de obra nueva, el comprador debe abonar el impuesto sobre el valor añadido (IVA), que es de un 10% sobre el precio final de venta. Además, debe hacer frente al impuesto sobre actos jurídicos documentados (AJD), que varía dependiendo de la comunidad autónoma.
Ventajas de las Viviendas de Segunda Mano
La vivienda de segunda mano, suele tener un precio más asequible, pero suele requerir realizar reformas. Las viviendas de segunda mano suelen requerir en muchos casos una rehabilitación o una reforma. Además, la actualización de las normativas, en sistemas de seguridad antiincendios, por ejemplo, obliga a los propietarios a acometer cambios en el edificio. Otras cosas a tener en cuenta son:
- Ubicación Céntrica: Muchas viviendas de segunda mano están ubicadas en zonas más céntricas y consolidadas, lo que puede ser conveniente para aquellos que valoran la accesibilidad.
- Reformas: La antigüedad y el estado de conservación de la vivienda marcarán la magnitud de las reformas. Es imprescindible comprobar su estado antes de comprar el inmueble. También es interesante inspeccionar la vivienda a diferentes horas del día para comprobar si tiene suficiente luz natural o si hay un exceso de ruidos. Esta revisión debe realizarse también en la fachada y en las zonas comunitarias, como el ascensor.
- Impuestos: Los impuestos son otro factor a tener en cuenta cuando se trata de una viviendas de segunda mano, el comprador debe hacer frente al impuesto sobre transmisiones patrimoniales (ITP), cuya cuantía depende del porcentaje que se aplica sobre el precio de compra que aparece en las escrituras y de la comunidad autónoma donde se ubica la vivienda, o bien el valor de referencia a efectos de compraventa que se indica en el Catastro si este fuera superior al precio de venta.
Las entidades bancarias consideran tasación y perfil del solicitante, no distinguiendo entre viviendas nuevas y de segunda mano al otorgar hipotecas. Tu elección se basará en preferencias, circunstancias personales y presupuesto. Ambos tipos de viviendas tienen ventajas, la elección final dependerá de lo que más te convenga.
Si está interesado en comprar obra nueva o de segunda mano, ya sea de obra nueva o de segunda mano, no dude en echar un vistazo a nuestro listado de viviendas. Además, puede ponerse en contacto con nosotros y, si nos comunica sus requisitos, le ofreceremos las opciones disponibles que se ajusten a sus necesidades.
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